Los autónomos tienen la posibilidad de contratar seguros de responsabilidad civil para cubrir sus interacciones con terceros.
Estos seguros se encuentran ligados a la propia actividad empresarial por lo que se pueden desgravar en Hacienda ya que protegen al trabajador ante eventualidades derivadas del desarrollo laboral.
Los seguros de responsabilidad civil llevan consigo un marco de protección específico para maquinaria pesada que cubre ciertas herramientas susceptibles de deterioro o bajo algún riesgo asociado al trabajo.
En cualquier caso, la legalidad tributaria de nuestro país entiende que la contratación de estos seguros se hace en pos de un desempeño más fiable y le permita continuar en caso de que sus medios de trabajo hayan ocasionado un detrimento patrimonial en un tercero.
Si se da la situación de que se trate de un seguro de responsabilidad civil equiparable a cualquier otro gasto derivado del desempeño de la actividad laboral, el autónomo tendrá la oportunidad de deducir su importe íntegro. En cuanto a los seguros de materiales que contratan los autónomos para proteger su inmovilizado también son deducibles 100 %.